Hace tiempo un libro se puso muy de moda: Los hombres son de Marte, las mujeres son de Venus. El autor, John Gray, un psicólogo americano especializado en terapia de pareja, explicaba ahí las diferencias psicológicas y de comportamiento entre ambos sexos.
Libros de autoayuda y de cómo mejorar las relaciones amorosas hay miles… pero este era especial.
ADORABLE, la ópera prima de la noruega Lilja Ingolfsdottir (Oslo, 27 de agosto de 1976, un nombre imposible, pronúnciese Lilia Ingolfsdotar) no es una película sobre la autoayuda, pero sí sobre la exploración y aceptación de uno mismo (de una misma, en este caso), de la autoestima (femenina; es el punto de vista de ella), y de cómo todo eso influye en las relaciones amorosas (y afectivas en general).
Por eso, cualquier espectador puede sentirse identificado en algún aspecto.
ADORABLE (título original: Elskling), es un drama magnífico que narra la crisis matrimonial de una mujer (interpretada por Helga Guren) y un hombre (Oddgeir Thune), en clave psicológica y de thriller. Los porqués se cuentan a lo largo del film. ¿Es posible reparar una ruptura?
En una de sus canciones, Sting sentenciaba: “If You Love Somebody, Set Them Free” (Si amas a alguien, déjalo libre). Pero primero hay que amarse a uno mismo. Con sus virtudes y sus defectos.
Felicidades. Una película que destila autenticidad.
Muchas gracias.
En ADORABLE ella está amargada y es intensa y complicada; él está siempre de buen humor y es alegre y fácil. Ella tiene razón, sus enfados están justificados, pero, al menos al principio, cae mal. La película muestra muy bien lo que siente cada uno.
Es curioso que digas que ella es difícil y que te cae mal, porque me han dicho de todo. Algunos me decían: “Oh, ella es alguien muy difícil, pero poco a poco me fue cayendo bien”. Otros, “Oh, él no asume responsabilidades, me cae fatal”… Así que la gente proyecta sus propias vidas e historias en la película, y es muy interesante.
He leído que la idea le vino porque tuvo una crisis con su marido.
La película es muy personal. Las escenas son ficción, no están basadas en mi vida, pero el guion nació de mi propia experiencia y es el marco de trabajo de la película de hace muchos años, siete u ocho años. Durante mi crisis personal, nos separamos y yo me fui a un apartamento, y ahí me quedé mucho tiempo, pensando, llorando, reflexionando, escribiendo… Eso no era ni muy cinematográfico ni muy interesante: ver durante 90 minutos a una mujer en un apartamento mirando por la ventana (ríe). Así que empecé a explorar todo este material y a estirarlo en diferentes direcciones, a dramatizarlo, y a hacer todo tipo de escenas que podían ocurrir. Luego están los actores y sus interpretaciones, y en el curso de tantos años de desarrollo, ADORABLE ha sido muy bien recibida. Hace unos días gané un premio en Marruecos (también ha obtenido premios en los festivales de Karlovy Vary, Pekín y en el Barcelona Film Fest), en China está en 3.000 cines… Muchos me han dicho: “Es personal. Soy yo. Es mi vida china, es mi vida árabe..” Ha sido abrumador ver que somos tan parecidos. Ahora siento que la película ya no me pertenece, sino que pertenece a los demás.
Los personajes se quieren, pero él evita el conflicto, y ella, aunque tenga razón en la cuestión de fondo, se vuelve arisca y con el reproche constante. Usted explora la autoestima y el cambio de actitud. El amor por sí solo no es suficiente…
Mi intención era mostrar el potencial de la relación. En cualquier situación en la que alguien tiene una crisis con alguien, siempre puedes tender la mano y elegir ser transparente diciendo: así es como me siento realmente, sin máscara”. Puedes elegir ser auténtico y arriesgarte al rechazo. Es una película sobre la conexión y sobre el hecho de que nos necesitamos los unos a los otros. Es difícil tender la mano y decir: “¿Podemos encontrarnos?”
Es muy creíble lo que muestra. Él no la aguanta porque siempre está recriminándole cosas.
Él la quiere, pero tiene este mecanismo de retirarse todo el rato. Él solo se quiere ir de su dolor. Solo quiere alejarse de ella porque le invade. Y en cuanto ella se pone firme y dice: “me cuidaré a mí misma”, es cuando él tiene ese espacio para sentirse a sí mismo, ese espacio para darse cuenta de que, quizá, también tiene parte de responsabilidad y puede ver sus fallos, y, por supuesto, él tiene muchos problemas. La película también podría ser sobre él, su viaje, sus problemas y sus patrones subconscientes. Pero es la película de ella, sobre ella. Aunque él tenga la oportunidad de ver en su interior y tener revelaciones sobre sí mismo.
No sé si es demasiado personal, pero, ¿qué ocurrió en su caso? ¿Repararon su ruptura? ¿Volvió con su marido?
Sí, mi marido es el director de fotografía de la película.
¡Vaya! Eso hace a ADORABLE aún mejor.
(Ríe). Sí. Ha sido estupendo hacer esta película juntos.
Porque su marido (Øystein Mamen), sabe que es él, claro.
Bueno, ya no es él, pero sabe que está basada en los problemas que tuvimos. Y fue muy generoso diciéndome: “Siéntete libre para hacer lo que quieras con este material. Puedes desarrollarlo”. Hice muchas cosas con el personaje que ya no son él, y mi marido me decía: “Oh, Dios mío, yo no soy ese. Yo no diría eso o no haría eso” (ríe), pero insistió en que fuera libre y creativa, y decidimos rodarla juntos. Aunque el otro día me decía: “Quizá deberíamos también hacer su versión, la de él”, y yo le constestaba: “Sí. Podrías dirigirla tú”.
Eso sería estupendo. Usted escribió el guion. ¿Contó con la ayuda de un punto de vista masculino o solo lo que habló con su marido?
No. En realidad solo fue mi punto de vista, o el punto de vista de ella. Quería hacer esta historia femenina.
Y nada desde el punto de vista de un hombre. Para ver si un hombre estaría de acuerdo con la actitud que él tiene.
Exacto. Sería muy distinto. Pero es curioso, porque un productor me dijo el otro día que a los hombres les gustará mucho la película ya que varios hombres le habían dicho: “Por fin ella ha hecho un ejercicio de introspección”. Así que muchos hombres creen que la película es muy buena, y he estado jugando con eso. Es el punto de vista femenino, pero, al mismo tiempo, no quería hacer una película polarizada o que dijera que él es el malo. Realmente es sobre la dinámica de la relación. Ambos intentan hacerlo lo mejor posible con el conocimiento que tienen y con la mochila que traen a la relación. Ambos lo sufren y lo luchan, y quieren estar juntos, se quieren mucho, pero tienen todos estos patrones y toda la presión externa de la sociedad en que vivimos. Así que es muy difícil. Esta película es sobre el potencial que puede haber en una crisis como esta, en la que quizá puedan avanzar. Aquí el malo no es ninguno de los dos.
Es usted muy valiente. Quizá a las feministas radicales no les guste tanto.
Para mí este es el siguiente nivel del feminismo, porque yo estaba harta de ver (en el cine) o mujeres que siempre son o muy buenas, o son víctimas de algo externo, o tienen cinturón negro de kárate y son como hombres… Y pensaba: “No me veo en ninguna de estas mujeres”. Claro que puedo estar enfadada y sentirme víctima en algunas situaciones, pero al mismo tiempo quiero sentirme reflejada y retratar a las mujeres como seres humanos. Las mujeres hemos tenido mucho miedo a mostrar a las mujeres como seres humanos, y siempre las vemos como que son tan buenas…
Nos da tanto miedo mostrar que si algo de nosotras no es tan bueno, iremos directamente a las épocas oscuras, y perderemos nuestro poder. En 2025 tenemos que avanzar. De acuerdo. Queremos ser retratadas igual que los hombres. Los hombres siempre son seres humanos, y tienen muchas capas, y muchas imperfecciones; y realmente tenemos que reflejar a las mujeres igual: con sus capas e imperfecciones. Quería evidenciar esta mentalidad; la forma de pensar y de ver las cosas, lo que muchas mujeres piensan. De los niños, del hogar, de toda esta logística. Quería mostrar eso en una estructura patriarcal. A veces pensamos que si contamos una historia tiene que ser así: dentro de ese marco del hombre y de la forma en la que el hombre ha contado las historias. Hacemos eso subconscientemente. Nos movemos en el terreno del hombre e intentamos ser hombres en la forma de contar historias. Y quería ser una mujer contando esta historia.
Exactamente.
Lo extrapolamos al cine y creo que nos da miedo que no sea lo suficientemente válido, vigente, y que el hombre se reirá de nosotras, y que no es lo suficientemente interesante. Pero quería tomar el espacio y decir: “Este material está en vigor”. Y ha sido interesante ver que yo tenía razón. ADORABLE ha conseguido premios en todas partes de hombres y de mujeres.
Porque es muy real. Uno se identifica. Y algunos hombres también se identifican.
Sí, sí. Los hombres me vienen y me dicen: “Yo también soy María. Al final entiendo por qué está tan enfadada”. Y eso ha sido un gran tabú: el enfado femenino, la ira femenina y la manipulación femenina. No creo que sea tan raro que las mujeres tengamos ira y seamos manipuladoras. Porque cuando no tenemos poder, estar enfadadas es una forma de intentar sentir el poder. Y en cuanto a la manipulación, llevamos siglos aprendiendo que no podemos pedir que se sacien nuestras necesidades, así que tenemos que encontrar formas indirectas, ya que no hay espacio para decir: “necesito esto”, y conseguirlo. Es imposible conseguirlo. Así que hemos sido súper listas desarrollando formas indirectas de manipulación para satisfacer nuestras necesidades. Por una razón muy justificada. Y por eso no nos da vergüenza. Y los hombres se avergüenzan de las mujeres por eso, y simplemente deberíamos decir: “Sí. Somos manipuladoras por esa razón. Y estamos enfadadas por eso. Y está bien. Y no pasa nada”. Y aun así, tenemos nuestro sitio en la mesa. Por eso hemos desarrollado estos aspectos.
¿Cómo encontró al actor? Es muy atractivo y muy carismático. Oddgeir Thune.
Sí. Yo quería a alguien que no fuera muy conocido y vino al casting. Este es su mayor papel, y también el de ella. Él está muy encasillado. Ella, no. Ella no tiene nada que ver con su papel. Pero el es muy… Y lo dice en las entrevistas: “Mi vida diaria es así”. Llegó a la escena con una intuición muy fuerte.
Es muy buen actor.
Sí, es fantástico. Un actor muy físico. Helga, sin embargo, es una actriz muy analítica. Tienen formas muy diferentes de abordar sus personajes.
Y se ve. Incluso cuando él la mira, a ella, o la situación, percibes su angustia. “Quiero largarme ya, o no te soporto”. O cuando llega a casa y está tan contento y cariñoso con ella, lo transmite de una manera muy física. Ella, también es muy buena actriz. Y me gusta mucho el personaje de la terapeuta de pareja. Es excelente la escena en la que la psicóloga facilita con suavidad y sin invadir su espacio que la protagonista se relaje, sea ella misma y no intente justificarse. De repente, sola ante sí misma, la paciente rompe a llorar.
Sí. Esa es mi escena favorita de la película.
Secretos de un matrimonio, de Ingmar Bergman, o Historia de un matrimonio, de Noah Baumbach, son películas buenísimas. Aquí, sin embargo, usted llega a otro nivel haciendo comprensible por qué ella está tan amargada, y por qué él no la puede soportar.
Gracias. No es que no la aguante, es que creo que interiormente él no se vale por sí mismo. No siente su propia integridad y se avergüenza de eso.
Y también evita el conflicto.
Sí. Ha aprendido que tiene que ser bueno todo el rato, así que intenta ser bueno en vez de ser auténtico y transparente. Siempre está bajo estos extremos oscuros en lo que no dice lo que realmente siente, ella lo percibe, y eso la enfada. Porque ella no se siente a salvo con él. Él no la apoya de una forma que la haga sentir segura, sino que simplemente intenta ser bueno. Ambos tienen este tipo de máscaras, y tienen subcorrientes y opiniones que se callan. Ella trata de ser una mujer fuerte e independiente, pero en su yo más profundo quiere recibir apoyo y no estar sola. Pero eso le da vergüenza. Ambos sienten vergüenza de aspectos de sí mismos.
También es muy interesante como la madre de ella le recrimina a la protagonista cosas de la infancia con reproches disfrazados de bromas.
Sí.
Woody Allen me dijo algo así como que si te tienes que trabajar una relación, es que en realidad no funciona. Solo cree en las relaciones que fluyen por sí solas.
Bueno, mira sus relaciones (ríe). No estoy segura de que sea un buen consejo. Para serte sincera, él no sería la primera persona de la que tomaría consejo en cuanto a relaciones amorosas.
Me sorprende que su película no estuviera nominada al Oscar este año, ni en festivales como Venecia o Cannes.
En el cine, en las estructuras superiores, es duro hacerse camino como mujer.
Una película que le haya impresionado.
La que más, El Espejo, de Tarkovski.
De verdad, haga la segunda parte con su marido con el punto de vista de él.
Creo que eso se lo dejaré a él (ríe).
Felicidades y muchas gracias.
Muchas gracias. Un placer.
