El que pringa es José Luis Ábalos, pero estaban rodos en la ‘pomada’.
En lo de los sobres llenos de billetes, para ser más precisos.
Este miércoles peregrina al Tribunal Supremo el exministro Ábalos y al paisano, antaño todopoderoso secretario de Organización del PSOE, no le cabe un cachuete, porque puede salir hacia prisión.
A día de hoy, se encuentra en el punto de mira tras recibir una cantidad significativa de dinero en efectivo por parte del PSOE. Según informes de la Unidad Central Operativa (UCO), Ábalos habría recibido un total de 60.270 euros entre 2014 y 2024, con un notable aumento desde 2018, coincidiendo con su llegada al Gobierno como ministro de Fomento.
Lo curioso es que, durante este periodo, no se registraron reintegros en efectivo desde sus cuentas bancarias, ni pagos con tarjeta ni retiradas de cajero. Esta falta de actividad financiera genera preguntas sobre el origen y destino del dinero que recibió.
En este contexto, Ábalos ha decidido acudir al Supremo sin su abogado y tirando de uno de oficio, para tratar de aclarar estos pagos, que Pedro Sánchez ya ha reconocido que también cobraba.
El marido de Begoña y todos los demas.
Porque el asuntoi apesta a Caja B y a financiación ilegal del PSOE.
Detalles inquietantes
Los datos que maneja la UCO son sorprendentes.
Además de los 60.270 euros mencionados, su asistente, Koldo García, ingresó la friolera de 207.955 euros en efectivo durante el año 2020. Esto plantea interrogantes sobre las prácticas financieras del PSOE y su transparencia.
Además, se ha revelado que Ábalos desembolsó 95.000 euros sin dejar rastro alguno, incluyendo unos impresionantes 20.799 euros destinados a gastos personales con una fuente de ingresos no declarada. Este aspecto es especialmente preocupante y pone en entredicho la transparencia financiera del exministro.
Justificación cuestionable
El presidente Sánchez ha negado cualquier indicio de financiación ilegal dentro del PSOE; sin embargo, el informe de la Guardia Civil señala que no hay pruebas definitivas al respecto, aunque sí menciona gastos no declarados. En este sentido, los pagos realizados por Ábalos han sido objeto de controversia.
Un dato interesante es que los ministerios y el Senado tienen un sistema mixto para realizar pagos en efectivo relacionados con viajes y manutención. Sin embargo, estos procedimientos suelen estar regulados y son bastante distintos a lo que se está investigando en este caso.
Un futuro incierto
Este 15 de octubre de 2025, Ábalos comparece ante el Supremo para dar explicaciones sobre estos pagos en efectivo del PSOE que han suscitado tantas dudas. De no aportar una «confesión» o pruebas contundentes que respalden su situación, las consecuencias podrían ser graves: un posible ingreso preventivo en prisión.
La falta de reintegros a sus cuentas entre 2018 y 2023 es alarmante. Durante este tiempo, «desaparecieron las retiradas en efectivo», lo cual resulta extraño si tenemos en cuenta que recibía anticipos significativos en metálico.
