HABLA DE LAS VIEJAS HERIDAS EN LOS BULLS

Scottie Pippen en ‘La Revuelta’: el eterno compañero que nunca cena con Michael Jordan

Scottie Pippen revela en 'La Revuelta' la distancia que persiste entre él y Michael Jordan, a pesar de haber compartido una de las hazañas más memorables de la NBA

Scottie Pippen en La Revuelta con Broncano
Scottie Pippen en La Revuelta con Broncano. PD

Pisar el plató de La Revuelta como una leyenda del baloncesto mundial no es algo que se viva todos los días en Madrid.

Scottie Pippen, icónico número 33 de los Chicago Bulls, fue recibido con el entusiasmo de quien, junto a Michael Jordan, transformó para siempre este deporte.

Sin embargo, ni los seis anillos de campeón ni la mágica conexión en la cancha han podido sostener una amistad fuera de ella.

En una velada colmada de anécdotas y recuerdos, Pippen dejó claro el muro invisible que lo separa de Jordan: «Él nunca viene. Tiene a su propia gente, juega con distintos golfistas» .

Una relación forjada en la cancha y rota fuera de ella.

No es un secreto que la relación entre Scottie Pippen y Michael Jordan ha sido, al menos, distante fuera del parqué. Pippen lo resumió con sinceridad: «Mi relación con Michael Jordan nunca fue muy cercana. Pero cuando jugábamos, teníamos gran química. Así es este negocio. Igual con Phil Jackson. Ya no somos amigos cercanos. Así es la vida, las cosas cambian». Sus palabras, expresadas en Madrid durante la promoción del primer All Star inclusivo, confirman lo que muchos sospechaban desde hace tiempo: la admiración profesional no siempre se traduce en amistades duraderas.

Durante la charla, Pippen evocó con nostalgia los años dorados de los Bulls, pero también enfatizó que, entre todos los compañeros con los que conquistó la NBA, puedo contar con una mano los amigos con los que aún hablo. La figura de Jordan sigue presente en cada conversación, aunque casi siempre como un contraste: «No importa a quién tengas, necesitas un equipo. Un solo jugador no te hace ganar. Se necesitan soldados, guerreros, jugadores que se sacrifiquen…».

Una de las revelaciones más sorprendentes de esa noche fue su comentario sobre las cenas y reuniones entre antiguos compañeros. Pippen, sonriendo pero firme, admitió que Jordan rara vez aparece: «Nunca viene a las cenas de compañeros. Tiene su propio entorno» . No se trata solo de agendas ocupadas o del estrellato; es un reflejo de caminos personales que se separan tras el éxito compartido. Mientras otros exjugadores mantienen cierto contacto, Jordan ha preferido rodearse de su círculo más íntimo, lejos del vestuario y aquellos días gloriosos.

La distancia entre ambos se hizo más palpable tras el lanzamiento del documental The Last Dance, donde, según Pippen, se trató más de Michael buscando enaltecerse y ser glorificado que de reflejar el verdadero espíritu del equipo. Pippen publicó su autobiografía Unguarded para ofrecer su propia versión sobre lo sucedido y no ha dudado en señalar cómo las diferencias económicas y personales crecieron después de la emisión de la serie.

El vínculo se debilitó aún más con la exposición mediática sobre sus vidas privadas, como el romance entre su ex, Larsa Pippen, y Marcus Jordan, hijo del legendario número 23; que acaparó titulares y aumentó la tensión entre ambas familias.

El hombre detrás del mito

A pesar de las diferencias existentes, Pippen no reniega del legado compartido. «Ganamos seis campeonatos juntos. Nadie ha conseguido superarlo. Todavía», afirmó en Madrid sin temor a que ninguna franquicia actual logre igualar su hazaña; aunque reconoce que figuras como Wembanyama podrían alterar el panorama. En su intervención también destacó cómo la globalización ha modificado la NBA, incrementando el número de jugadores internacionales y elevando una competitividad que ha reducido las distancias entre Estados Unidos y el resto del mundo.

Más allá de estadísticas y trofeos, la visita de Scottie Pippen a España permitió vislumbrar el lado más humano de esta leyenda. No dudó en bromear sobre su fortuna actual —«Tengo algunos cientos de miles»— ni en sumarse a una pachanga inclusiva junto a David Broncano y varios jugadores en silla de ruedas. Su humildad y la naturalidad con que aborda sus altibajos le alejan del aura casi inalcanzable que rodea a su antiguo compañero.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído